Que
sí vale que te dejo darme un simple abrazo le dije y que ocurrió? Que se pasó
de la raya, que yo seguí que la sensación fue preciosa, el momento inevitable,
con el frío del invierno y yo deseando besar esos labios tan dulces, entrar en
calor…tocar sus frías manos y compensarlas con las mías, que se iba, que se me
marchaba una larga semana lejos de mí, que me despegué de él con ganas de más,
que era el chico perfecto por momentos, que esos largos minutos abrazados, que
no se puede parar el tiempo, sino lo habría parado. Que cuando no estuvo, no le
eché en falta, no le extrañaba, no buscada abrazos donde no les había, ni
caricias, ni un solo beso en la mejilla, no extrañaba nada de él, volvió y todo
ya cambió, no comprendía que me quería de verdad, y pensé que igual le podía hacer
hasta daño…pero no, una noche hablando con él me di cuenta de quién era
verdaderamente, y que sabe rectificar, aprender de su errores, comprendí que le
quería mucho, pero no entendía nada, ahora en año nuevo solo queda dejar pasar
el tiempo, porque él por mucho que quiera no puede estar a mi lado en todo
momento, porque está lejos, serán pocos kilómetros, pero en realidad es una
eternidad
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